jueves, 26 de noviembre de 2015

Del Barroco al Neoclasico

Entre finales del siglo XVI y la primera mitad del siglo XVIII el arte novohispano siguió los cánones del barroco: un estilo que favorecía el uso de una decoración abundante, de efectos dramáticos de luz y sombra, así como de un lujo suntuoso en los colores y en los acabados. El barroco era ideal para expresar la devoción católica de los novohispanos y exhibir las grandes riquezas proporcionadas por la minería. La arquitectura, la escultura y la pintura tuvieron como temática principal la religión, tanto en espacios públicos como privados. La música barroca estaba presente en las misas, los palacios, las plazas, las fiestas privadas y publicas de Nueva España. Sin embargo, pese a que predominaba el carácter religioso, se desarrollaron diversos géneros como la música instrumental, opera, zarzuelas y tonadillas escénicas. En la literatura barroca novohispana destaca el uso de contrastes, contradicciones, adjetivos y metáforas exageradas. Sor Juana Inés de la Cruz y Carlos de Sigüenza y Góngora son los representantes mas destacados de ese estilo. Entonces florecieron el soneto, la crónica y el teatro, entre otros.
En la segunda mitad del siglo XVIII llego a Nueva España  el neoclásico, el cual alcanzo su esplendor durante el XIX. Como su nombre lo indica, tal estilo busca revivir el arte clásico, es decir, el de los griegos y romanos de la antigüedad; rechazaba la ordenación del barroco y favorecía formas simples y armoniosas.
El arte neoclásico se arraigo en el territorio novohispano gracias a la real Academia de San Carlos, institución fundada en 1781. En esta, los maestros que llegaron de Europa enseñaron a los artistas novohispanos los criterios de ese nuevo estilo. Entre otras características, al aplicarlo a la arquitectura, la pintura y a la escultura:
  • Se buscaba la belleza ideal basada en la sencillez, en línea recta, en la simetría y en las proporciones.
  • Se emplearon temas mitológicos y elementos clásicos como las columnas, los arcos de medio punto, los frontones y las cúpulas, entre otros.
  • Se simplifico la decoración y predominaron los motivos florales.
  • Además de iglesias y palacios, se construyeron hospitales, escuelas, aduanas, museos, bibliotecas y teatros, pues se consideraba que el arte debía estar al servicio de la sociedad.
  • Se embelleció a las ciudades con plazas y jardines.  
En la literatura se dio un renacimiento de la fabula y otras composiciones moralizantes. También surgió la poesía nacionalista y patriótica, en formas de odas e himnos heroicos. Asimismo se desarrollo el periodismo.

Actividad N.26



Arte Barroco y Neoclasico